En un “Cilindro” con mucha gente a pesar del horario, la “Academia” ganó un partido fundamental para sus aspiraciones en la Copa Conmebol Libertadores, volviendo a su buen juego desde el comienzo, pero también a sus distracciones que casi le cuestan el resultado.
Y una noche volvió el Racing, que le gusta a la gente que disfrutamos del buen fútbol, con dinámica y presión alta, con absoluta posesión y mejor trato de la pelota, pero fundamentalmente siendo vertical para meter en un arco a un Aucas, que deseaba volver a Ecuador lo antes posible.
Al minuto nomás el “Demonio” Gabriel Hauche asistió a “Maxi” Romero que entrando al área, definió “Picando” la pelota ante la salida de Hernán Galíndez y la estrelló en el travesaño, para ahogar el grito de gol en el “Presidente Perón”.
Pero Racing siguió buscando el gol y a los 11 minutos, lo encontró con el mismo “Maxi”, que esta vez fusiló de cabeza entrando al área chica tras asistencia de Gabriel Rojas, dejando al arquero y a un defensor de Aucas enredados dentro del arco, para el 1 a 0 más que merecido. No aflojó y a los 16 minutos, apareció el Juan Ignacio Nardoni que la “Acadé” fue a comprarle al “Tate”, ese mediocampista decidido que pisa el área para hacer el gol y lo hizo tras asistencia de “Maxi” Romero, que desparramó al pobre “Hernán” de los “Orientales”, previo pase sutil de Paolo Guerrero y meritorio 2 a 0.

A los 32 minutos, el árbitro sancionará un penal por mano en el área tras el centro de Gabriel Rojas, pero acertadamente luego anulará mediante chequeo de monitor «VAR» en campo, cuando Gonzalo Piovi se preparaba para “Romperle el Arco” al «Guardameta Ecuatoriano».
La “Acadé” no pudo “matar” el partido en el primer tiempo y lo sufrió en el segundo, cuando Erick Castillo y luego Luis Cangá le empataban el «Match» en dos, en solo 10 minutos de juego, tras dos desatenciones defensivas.
Racing salió a buscar una victoria que estaba casi decretada, pero el resto físico ya no era el del principio y la forma tampoco.
A falta de cuatro minutos para el final, llegó el “Blooper” de Wilker Ángel que colgó a su propio arquero, tras centro al área de Facundo Mura, cuando no había nadie de Racing allí y 3 a 2, para desatar el delirio de medio «Avellaneda».
Agónico pero merecidísimo triunfo de Racing por lo mostrado en el primer tiempo, que puntea el Grupo esperando por Flamengo en la próxima. Racing lo ganó a lo Racing, sufriendo un partido que lo dominaba a su gusto y se complicó solo por errores reiterados, pero lo ganó justamente sobre final cuando menos lo esperaba.
Foto de portada: Gentileza de El Liberal.

