La apertura del Grupo C de la Copa del Mundo, estuvo a cargo de la Selección Argentina y de Arabia Saudita, viéndose las caras en el estadio Lusail, que posee una capacidad para 80 mil personas y que, a pesar de la cercanía del país árabe, el público en su mayoría vestía camisetas celestes y blancas.
Al comienzo del partido, se destacó un Messi enchufado y generando la primera ocasión de peligro, al minuto de juego, obligando a despejar la pelota al arquero y ganando un tiro de esquina. Pasaron seis minutos más, hasta que el árbitro sancionó penal, por una falta cometida a Leandro Paredes y que el “Diez argentino” lo cambió por gol. A partir del 1 a 0, “Los Verdes” empezaron a trabajar muy bien su línea defensiva, adelantando a los cuatro del fondo y jugando al límite con el fuera de juego, cosa que le costó todo el primer tiempo a los dirigidos por “Scaloni”, ya que convirtieron tres goles estando en offside, uno de Messi y dos de Lautaro Martínez, cerrando el primer tiempo, con siete fuera de lugar para el combinado nacional.

El complemento se dio por iniciado con el octavo offside de Argentina y el gol de Saleh Al-Shehri, a los 3 minutos, definiendo al segundo palo lejos del “Dibu” Martínez, que no pudo alcanzarla y todo se volvió desconcierto, en el equipo albiceleste. Llegando a los 8 minutos del segundo tiempo, ahora el diez de Arabia Saudita Salem Al-Dawsari, fue el encargado de dar vuelta el encuentro, sacando un potente remate desde el borde del área, hacia el palo izquierdo del arquero, que, a pesar de rozar la pelota, no tuvo oportunidad de desviar semejante disparo.
Scaloni trató de revertir la situación moviendo el banco, con la entrada de jugadores como Enzo Fernández, Julián Álvarez, Marcos Acuña y Lisandro Martínez, que entró por el “Cuti” Romero, que no se encontraba bien, pero igualmente los rivales siguieron defendiéndose aguerridamente y realizando cambios, para sumar jugadores en su propia área y no dejar entrar al rival, cosa que les funcionó y aunque en las estadísticas finales pierdan en todos los números (excepto en los fuera de juego) se llevaron 3 puntos importantísimos y ahora a la selección le queda por jugar dos finales seguidas, pero todavía está a tiempo de revertir la situación.
Foto de portada: Mundo Deportivo.

