Una parte de la antesala de lo que será la definición por la permanencia en la última jornada ocurrió este domingo en un Brigadier General Estanislao López colmado por su gente que recibió eufóricamente el choque entre Colón y Talleres por la decimotercera fecha de la Copa de la Liga.
En el comienzo del cotejo, parecía que el “Sabalero” iba a sufrir los ataques de Depietri por la izquierda pero enseguida dejó en claro que no, ya que cuando apenas iban 5 minutos dentro de la cancha, Rubén Botta sobre la banda derecha habilitó de taco a Nardelli que pasaba por detrás suyo para que envíe un centro al segundo palo que “Wanchope” de cabeza se encargó de bajarlo para Perlaza que, con el arco de frente, solo le bastó con pegarle de una para abrir el marcador en el amanecer del encuentro y transmitir tranquilidad a los hinchas que estaban presentes.
Al no quedarse satisfechos con el gol tempranero, los rojinegros siguieron con ese hambre de llevarse el partido y así al paso de 3 minutos desde el primer tanto, Ramón Ábila le ganó la espalda a un defensor debido a una pelota proveniente de un despeje de cabeza para encarar al arco desde la derecha, meter un enganche para hacer pasar de largo a su marcador y pegarle un violento remate de zurda para que el balón entre al arco tras estrellarse contra el travesaño poniendo el 2 a 0 parcial. Luego de obtener esta ventaja, los jugadores se replegaron ante un tímido rival que al principio no encontraba la forma de llegar al área e intentaron con varios disparos desde afuera que terminaban saliendo desviados, aunque de a poco fueron encontrando su lugar y en la última de la etapa inicial estuvieron muy cerca del descuento con un cabezazo de Depietri gracias a la habilitación de Bustos donde Ibáñez pudo taparlo luego del pique para mantener su arco en cero antes del descanso
Con el correr de los minutos iniciales del complemento, se veía como un reflejo de lo que fue el final del primer tiempo pero el “Negro” despertó a tiempo y golpeó una vez más a “La T” a los 13 minutos, comenzando la jugada con el tiro libre por delante de la mitad de la cancha donde Delgado lanzó un centro para que nuevamente “Wanchope” se vista de asistidor y de cabeza se la pase a Galván que entraba por el otro palo para que como dice el dicho, “Dos cabezazos en el área es gol” y así fue, ya que el jugador a préstamo desde River Plate definió de esa manera el rotundo 3 a 0. Los cordobeses buscaron pero se notaba la frustración entre los jugadores y cuerpo técnico que dependían de que Garro con algún pase o jugada individual generara peligro pero no les funcionó, mientras que por el otro lado, Botta salió de la cancha exhausto a los 38 minutos siendo ovacionado por todo el público que coreaba su nombre, dejando todo listo para definirse en lo que será la última fecha del campeonato previo a los playoffs.
Foto de portada: Gentileza C.A. Colón.
